Capítulo 14

LA FIESTA DE CUMPLEAÑOS:

Ya sólo faltaban dos días para que terminara la apuesta, pero yo no quería seguir más. Me odiaba a mi mismo por lo que le estaba haciendo a Emi. Ella realmente me gustaba lo descubrí hoy en la mañana mientras estaba reflexionando y hoy mismo hablaría con Diego para decirle que tenía razón y no continuaría con la apuesta. Estaba seguro de mi decisión. Así que lo llame, pero no contestó seguro el muy flojo estaba durmiendo todavía.  No podía esperar a la fiesta estuve inquieto todo el día y Diego no contestaba su teléfono y al parecer tampoco estaba en su casa ARG justo cuando quieres decir algo importante la vida te pone todo más difícil. Y eran las 7 y me estaba bañando tendría que decirle a Diego lo de la apuesta en la fiesta y todo sería más difícil ya que cualquier persona nos puede escuchar, pero necesitaba romper esto ya. Simplemente ya no podía más. A las 8 cene y a las 8:30 me fui al lugar en dónde se iba a realizar la fiesta. Era un club había música, muy buena y todo el mundo estaba bailando, en eso alguien me agarro por atrás, y me dio un beso el cachete  cuándo me voltee era ella tan hermosa como siempre. Pero hoy estaba DIOS parecía una diosa. Tenía un vestido de azul que era como egipcio era suelto en el torso pero pegado en las piernas y le quedaba hasta las rodillas era más o menos de un lado. Tenía unos tacones azules y el pelo suelto pero estaba más despeinado y era sexy estaba maquillada estaba HERMOSA. Le agarre delicadamente su carita y le di un beso.

-Eres el mejor Manu te adoro.

-Y yo, pero en algo te equivocas tu eres la mejor.

Me agarro de la mano y me dijo:
-Ven te voy a presentar a mis amigas, ella como ya sabes es Luna, ella es Erika,…- y así un montón de presentaciones en eso vi a Lucía con un chico agarrados de la mano-

-Ella no es Lucía.

-Sí amor papá dejo que viniera Mariana y Lisa están molestas- rió- es que ellas no pueden venir son muy pequeñas aún.

-Sí cierto- en eso sonó mi teléfono, era Diego por fin podría contarle.- Amor es Diego.

-Oh vente vamos a buscarlo.

Salimos y ahí estaba el con un regalo:

-Feliz cumpleaños Emiliana sé que no nos conocemos pero sé que podemos llegar a ser grandes amigos.

-Hola Diego, gracias pienso lo mismo.

-Amigo que tal.

-Bien bro.

Emi me presentó a un montón de gente le intercambie el número de celular con un motón de gente. Por fin Emi se fue a bailar con sus amigas y yo me dirigí a Diego:

-Amigo porque no contestabas necesito decirte algo.

-Mi celular murió ayer en la noche y no estuve en mi casa en todo el día porque estaba en el parque de diversiones con mi hermanita la deje en la casa y enseguida vine para acá.

-Ah ya.  Bueno lo que te tengo que decir es que no quiero seguir con esta apuesta. Emiliana es especial para mí y de verdad la quiero y no quiero hacerle daño.

-Por fin vas a dejar esta apuesta. No me parece bien que jugarás con ella, es muy buena persona.

-¡¿Qué jugarás con quién!? – Oh, oh por eso no quería hablar de esto en la fiesta. Me voltee y era Luna.-

-Con… nadie Luna… con nadie.

-¡Ah sí y por qué me pareció escuchar el nombre de mi mejor amiga en la oración! ¡Dime Manuel acaso no sabes todo lo que ella te quiere! ¡No lo puede creer eres horrible!- Estaba gritando como loca, y le dije por miedo a que Emi escuchara-

-No, no me parece bien por eso vine a terminar con esta apuesta, yo de verdad la quiero.

-¡No te creo no sabes todo el daño que le harás termina con ella cuéntale todo porque si no lo haré yo! No quiero que Emi que es una chica súper especial salga lastimada por un IDIOTA que no la sabe valorar y que solo la utiliza para apuestas. ¿Dime todo fue por eso, el viaje a la playa, el autocine, el regalo de cumpleaños y todas las cosas bonitas que le dijiste no era real?- me sentía fatal, es que de verdad si todo había sido por la apuesta, pero es decir ella de verdad me gustaba provocaba algo en mí y no quería perderla, había sido de verdad un idiota.-

- Sí-dije muy avergonzado- Sí todo fue por eso, pero de verdad yo la quiero, la quise siempre.  Cada vez que estaba con ella me sentía vivo, protegido, en las nubes y yo….

-Cállate, no pretendes engañarme también a mi ¿ok? Simplemente dile toda la verdad o te PROMETO que se lo diré yo.

-Por favor, no lo hagas, por favor. No la quiero perder.

-Lástima que no hayas pensado en eso antes de hacer esa estúpida apuesta.

-Por favor.

-Te doy una semana. UNA. No más y si no se lo dices se lo diré yo misma.

-Por favor no lo hagas- me estaba poniendo nervioso, la perdería, la perdería y yo la a… si yo la AMABA y no la quería perder por mí. Un estúpido idiota superficial. ¡ME ODIO!-

-Sí no quieres que lo haga, entonces hazlo tú, dile la verdad porque no me la calo como le puedes hacer eso a mi MEJOR amiga. Es Emiliana es una de las mejores personas del mundo y TÚ juegas con sus sentimientos.

-¡Pero yo la amo!-grité al final y me empezaron a salir lagrimas-La amo demasiado. Nunca había amado alguien así desde… hace mucho y ni siquiera se acerca a esto. Lo que siento por ella es demasiado fuerte. Por favor no la alejes de mí.

-Una semana.- me dijo y se fue-

Diego me abrazó y me dijo:

-Amigo metiste la pata. De verdad te gusta esa chica. Nunca te había visto así.

-La amo Diego y ni se acerca a lo que sentía Marisol.

-Lo sé Manuel.

-Y ahora la perderé por mi estupidez. Me odio.

-No, no la perderás yo no lo dejaré. Voy a hablar con Luna.

-Ok gracias amigo.

 Diego se fue y en eso llego Emi con una sonrisota  que desapareció en cuanto me vio llorando:

-Manu. Me abrazó- ¿qué te pasa?- la abrace yo también-

-Tengo miedo Emi.

-¿De qué?- dijo mientras me miraba a los ojos y me acariciaba la cara-

-De perderte.

-Tonto, nunca me vas a perder. Yo te quiero. Entiende, eres muy especial para mí.

-Emi, tienes que saber una cosa. Yo…-se lo iba a decir pero no pude así que dije algo que lamentaría no haber dicho antes de perderla- te amo.- se puso roja y me miro con una gran sonrisa.-

-Y yo a ti, más que a nadie en este mundo.

-Yo a más que a nadie en el universo.

Y nos besamos. Extrañaría esos besos. Pero a lo mejor si era honesto, ella me perdonaría. NO lo que hice es imperdonable. No la merezco.

Me sentí mal toda la noche. La mirada matadora de Luna no ayudaba mucho. Nos fuimos todos a las 6 am y Luna me volvió a decir que tenía una semana. Le di un beso en los labios a Emi y me fui ya que al parecer Luna la llevaría. ASH.