Capítulo 17

DOS AÑOS MÁS TARDE:

 Se puede pensar que después de dos años ya hubiese superado todo… pues no. No la volví a hablar con ella, estaba deprimido. Todas las tardes pasaba por su colegio y ahí estaba ella. Nunca notaba mi presencia, o eso creo, si no me ignoraba por completo. Los primeros días estaba siempre triste y lloraba en el hombro de Luna o de alguna de sus amigas. Un año más tarde ya no la veía, seguro que ya se había graduado. No estaba seguro de a qué universidad se había ido, así que la deje de ver. ME ODIO. Soy tan estúpido, yo estaba totalmente deprimido. Sólo estaba Diego conmigo. Ya no tenía tantos amigos, ya no era mujeriego, ya no salía ahora era el mejor de la clase. No tenía nada que hacer, así que lo que hacía todo el tiempo era estudiar. Sacaba 20 en todo, claro que los más felices de todo esto eran los profesores. Todos me amaban, claro que era mi primer año de universidad y ya estaba por pasar al segundo. Yo estudiaba derecho. Por fin se había acabado el día y llego Diego, que estudiaba arquitectura, a decirme su pregunta de todos los días:

-Manu, ¿quieres salir un rato?- a lo que yo le respondía como ya era costumbre-

-No Diego tengo que estudiar- pero esta vez Diego no respondió con su ‘’ok suerte’’ habitual si no que dijo-

-Manuel, ella de seguro que ya debe de tener un novio nuevo, ya debe haber hecho su vida de nuevo. Debe de estar en la universidad, estudiando duro, yendo a fiestas, pasándola bien con sus amigos y…

-Diego, si lo que intentas es animarme no sigas diciéndome eso.

-Lo que intento decirte es que tienes que salir adelante. No puedes estar estancado en una misma chica toda tu vida, una chica que lo más seguro es que ya te haya olvidado. Sé que la amabas.

-La amo- lo corregí-

-Olvídalo amigo hoy es viernes y está noche vamos a salir tu unos amigos y yo a bailar. Nada de peros es una orden.

-Bueno.- dije sin ánimos-Está bien.

-Que bueno, pasamos por ti a las 9.

-Ok-dije antes de salir a mi auto y suspirar.

Narra Emiliana:

Ya habían pasado dos años desde que estuve con ese idiota de… me cuesta decir su nombre, simplemente no lo puedo olvidar. Es un completo idiota. Pero estoy intentando salir a delante. Ahora estudio comunicación social, con Luna. Ese siempre fue nuestro sueño de pequeñas. Conocí a un chico se llamaba Daniel. Él se notaba que yo le gustaba y la verdad es que a mí me gustaba también un poco. Pero es que Manuel. Cada vez que besaba a Daniel, lo comparaba con los besos de Manuel. Simplemente no se comparaban. Hoy era viernes y en la noche saldríamos Luna Kike, el novio de Luna, Daniel, Lucía, Mariana, un amigo de Daniel de la facultad de arquitectura y yo. Si mis hermanas ya salían conmigo a festejar. Lisa se molestaba porque sólo tenía 13 y pues ella todavía no puede ir a rumbear.

Me preparé me puse rímel, pintura de labios, tapa ojeras, rubor, base, etc. Por fin tocaron a mi puerta eso me recordaba a los días con Ma… ¡NO EMI, NO! El nunca te quiso, sólo te utilizó como a una simple muñeca… ARG para Emi esto te hace daño. Agarré mi bolso y salí. Era Dani, le di un beso corto en los labios, pero él me agarro la cintura y me obligo a darle uno más largo. Entonces me abrió la puerta de atrás, supuse que era porque ya habían buscado a los chicos, Dani se sentó en el puesto del conductor, Andrés en el puesto de adelante y cuándo vi a quién tenía al lado me quede helada era…

Manuel:

No, le estaba parando a la conversación, estaba usando mi bb, viendo twitter y esas cosas. Tampoco le estaba parando al camino. Creo que estábamos buscando a la novia de…eh… a sí Daniel. Nos paramos supuse que habíamos llegado a la casa de la chica Daniel se bajo y toco la puerta. En eso Diego me dijo:
-Manuel a que no sabes quién es la novia de Daniel.

-¿Quién es?

Me corté era ella Emiliana. MI Emiliana. SHIT. Se estaba besando, que digo tragando con Daniel. Estaba tan hermosa. No había cambiado nada. Sólo de novio. Yo la quería tanto.

-Te odio-le susurré a Diego-

-Lo siento amigo, no sabía que ella estaría aquí.

-¿Qué? ¿Conocen a Emiliana?

-Digamos que sí.

-Ah ya.

En eso se separaron. Por fin. Él le abrió la puerta. No me había visto. Cuándo volteó me vio un rato, se quedo viéndome y dijo:

-¿Qué hace TÚ aquí?               

-Yo, nada.-dije cómo perrito rechazado-

-Te odio.

-Lo siento Emi, lo siento.

-NO me digas Emi. TÚ no tienes ese derecho.

-Está bien, lo siento.  No tenía intención de molestar.-me ignoró-

-Dani, Lu y Mari ya están allá. Luna se unió ¿no hay problema?

-Ok princesa, diles que ya estamos yendo para allá. Y claro que no hay problema. Te amo.

-Y yo a ti.

ARG, siento que lo hacía a propósito.  Agarró su celular y mando un texto. Me ignoro todo el viaje. Veía por la ventana. Por fin llegamos, Diego me dio una palmada en la espalda. Uff esta noche no la iba a pasar nada bien.

Llegamos y vimos a Mariana y a Lucía en la entrada del club. Cuándo me vieron me miraron con odio. Daniel le abrió la puerta a Emi y ella lo miro con amor, le tomo la mano y le dio un beso en los labios ella saludo a Mariana y a Lucía, ellas sólo me miraban con odio. Llegue a oír:

-¿Qué hace ese asqueroso aquí?- de parte de Mariana-

-Molestar-dijo Lucía- Sólo eso sabe hacer y romper corazones de gente que no se lo merece.

-Chicas olvidémoslo, no merece que hablemos de él. – Esta vez fue ella la que me miro con odio-

Se fue a tomarle la mano a su noviecito al parecer le conto todo ya que después el también me miro con odio. SHIT, si las miradas mataran…  Nos metimos en el club. Daniel y Emi bailaban muy románticamente, se notaba que él la quería y viceversa.

De repente se separaron, yo no bailaba sólo los miraba y me imaginaba si ese fuese yo, y Daniel se me acerco y me dijo…