Capítulo 18

ESTO ES GUERRA:

-Eres, un idiota.

-Hey, hey que te pasa.

-Cómo puede jugar con una chica cómo Emiliana. Tú no la mereces. En cambio yo, la haré feliz tengo mucho dinero ¿sabes? Le puedo dar lo inimaginable. A demás está demasiado buena.

-Triste, yo era igual que tú, sólo pensaba en lo buena que estaban las mujeres, pero Emiliana me cambio,  aprendí a amar. Eres un idiota. Ok, ok lo entiendo, yo en eso no puedo decir nada, pero tú también eres uno. Y chico si es por el dinero, mi papá es dueño de la Chevrolet.

-¿De la Chevrolet?-¿enserio? Ese tipo sólo  retuvo eso de toda nuestra conversación-

-Sí

-Yo la amo. Emiliana me pertenece.

-Emiliana no es un juguete tiene derecho de hacer lo que quiera y no es de nadie.

-Sí, aja lo que digas. Si llegas a tocarla de nuevo te voy a romper tu carita, ¿lo tienes claro verdad?

-  Me estás amenazando.

-Sí.

-No me asustan tus amenazas.

-A mí si me asustarían.

-Se nota que no me conoces

-Está bien esto es guerra.

-Guerra pues.

Y nos alejamos. Él se fue con Emiliana y le dio un largo y apasionado beso. Se notaba que lo hacía a propósito y se noto más cuándo después de besarla me regalo una sonrisa burlona. LO ODIO. Por fin se separo de Emiliana y yo fui y me acerqué a ella:
-¿Podemos hablar?

-NO

-Por favor, ya pasaron dos años.

-Precisamente, dos años en los cuales debiste haber estado con mil chicas más, ya que después de todo yo sólo era un juego.

-No, nunca fuiste sólo un juego. Para mi eras especial.

-Sí claro. Lo que digas Manuel.

-Yo no te he superado. TE AMO.

-Sí me amas tanto. Porque me dejaste ir.

-Querías acaso que… te fuera a buscar.

-Yo, no lo sé. Pero después de todo, tú nunca me quisiste. Sabes me hiciste mucho daño.  Porque yo de verdad te amaba.

-Yo te amo.

-Deja de decirme esas cosas. TE ODIO. TE ODIO POR TODO LO QUE ME HICISTE.

-Bueno en algo estamos de acuerdo porque yo… yo… ME ODIO.

Y me fui, Diego me vio irme y me siguió. Tomamos un taxi los dos él estaba callado. NO me preguntaba y la verdad se lo agradecía mucho.  Se quedo en mi casa. Nos dormimos enseguida.